domingo, 5 de abril de 2009

Desvaneciendo en la realidad

Parpados que luchan contra los segundos para no cerrarse, la necesidad de nicotina en mi cuerpo, Ludovico Einaudi en mis oidos y el replicar de teclas que intentan escribir cualquier cosa que me haga desvanecerme, evaporarme como por arte de magia, convertirme en viento y meterme en los pulmones de la gente que quiero, que realmente aprecio, para que se sientan impregnados por mi, como yo me siento por ellos.
La batalla de los parpados cada vez es mayor, la necesidad de nicotina menor, Ludovico Einaudi impregna el ambiente demostrando que sus dedos al piano pueden enamorar cualquier oido, y ese replicar de teclas que a cada segundo se hace mas amistoso...
Los parpados no quieren abrir, la necesidad de nicotina es nula, Ludovico Einaudi ha absorvido toda mi mente, todos mis pensamientos desaparecen, tan solo queda su melodia...expulso el humo de mis pulmones, y con el parte de mis 21 gramos de alma....
Mi cuerpo se desvanece poco a poco, los parpados han cerrado las persianas a la luz de la realidad....
Tan solo soy aire, me mezclo con las notas de piano y violín, entrando por las vias respiratorias de todo mi circulo, por cañerias humedas, calientes, secas, frias...que me sientan dentro...no quiero viajar a lugares hermosos, ni parajes que ningún ser humano haya visitado, sino quedarme ahí, para que nadie pierda mi esencia.

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